lunes, 7 de julio de 2014

POLÍTICA, FÚTBOL Y LA CRUEL HUMANA (LECCIONES DE VIDA TAMBIÉN ¿POR QUÉ NO?


“No existe amor a la camiseta…ya no hay camisetas para sudar, para honrar: son solo camisetas de trabajo, para cumplir una obligación y punto. Pero no todo está perdido…”

“Cuentos de futbol”, Aldyr García Schlee.

POLÍTICA, FUTBOL Y LA CRUELDAD HUMANA
(LECCIONES DE VIDA TAMBIÉN ¿POR QUÉ NO?)
Por: Israel Sánchez Zamora

El futbol es sin lugar a dudas el deporte más popular en la actualidad, alrededor del cual se tejen infinidad de intereses, esperanzas, mitos, luchas de poder, corrupción, …historias humanas.

Algunos dicen que es el gran distractor, ¡probablemente!. Aunque quien se quiere distraer, con cualquier cosa lo hace.

Y sin embargo nadie puede negar su poder, su influencia, ni siquiera los que lo miran con aire desdeñoso.

En lo personal tengo que admitir que me sigue gustando el futbol, tal vez menos que cuando era niño, pero me sigue emocionando sin lugar a dudas.

Por eso me importa una pura y dos con sal lo que las buenas y superiores conciencias opinen de él. Pero tengo que aceptar que si me gustaba más de chico, era seguramente porque lo veía con mayor inocencia. Cuando estás chico lo único que importa es jugar, divertirte y ganar; que cuando ves un partido tu equipo gane, no importa nada más, ni la FIFA, ni el racismo, ni los directivos, ni lo que opinen los demás, ni nada.

Sin embargo un día el juego deja de ser un simple juego y ahí pasan cosas tristes, pero también cosas maravillosas.

La injerencia de la política, o de los políticos en el futbol es clara. Incluye ejemplos como Benito Mussolini y la selección de Italia campeona de los mundiales de los años 1934 y 1938.

Algunas de las historias que uno puede encontrar al respecto del mundial de 1934 señalan que:

“Una vez conseguida la celebración del mundial en Italia, Mussolini se dirigiría a Giorgio Vaccaro, presidente de la Federación Italiana de Fútbol y miembro del Comité Olímpico Italiano, de la siguiente manera:

—No sé cómo hará, pero Italia debe ganar este campeonato.
—Haremos todo lo posible…
—No me ha comprendido bien general… Italia debe ganar este Mundial. Es una orden.”

Y ¡ganaron!.

Que para el mundial de 1938 Mussolini envió un telegrama al entrenador italiano Vittorio Pozzo, cuyo contenido era de sólo tres de palabras: "Vencer o morir".

Italia venció en la final 4 goles a 2 a los húngaros. Posteriormente el arquero húngaro Antal Szabó dijo: "Nunca me sentí tan feliz luego de una derrota. Con los 4 goles que me hicieron salvé la vida de 11 seres humanos. Me contaron antes de empezar el partido que los italianos habían recibido un telegrama de Mussolini que decía: "Vencer o Morir".

Ganaron".

El año de 1969, en la eliminatoria rumbo al mundial de México 1970, se dio el enfrentamiento de la selección de El Salvador contra la selección de Honduras, enfrentamiento que fue la antesala del choque militar que ambos vivirían poco tiempo después y que el periodista polaco Ryszard Kapuscinski bautizó como la guerra del fútbol.

El año de 1970 Brasil se corona campeón del mundo 4 goles a 1 en contra de Italia, siendo conocido el cuarto gol anotado por el capitán de la selección brasileña Carlos Alberto como el “Gol del Presidente”, ya que el entonces presidente de Brasil Emilio Garrastazu Médici (tercer presidente del régimen militar instaurado después del golpe de estado de 1964) predijo dicho resultado.

El año de 1978 Argentina sale campeón del mundial celebrado en su tierra, bajo una dictadura militar que duro del año de 1976 al año de 1983, escuchemos a uno de los presos de la dictadura:

"Todos los presos políticos, los perseguidos, los torturados y los familiares de los desaparecidos estábamos esperando que Menotti dijera algo, que tuviera un gesto solidario, pero no dijo nada. Fue doloroso y muy jodido de su parte. Él también estaba haciendo política con su silencio." Quien formula el cargo es Adolfo Pérez Esquivel, Premio Nobel de la Paz en 1980, que logró salir de la Unidad 9 de La Plata gracias a la presión internacional, el 23 de junio de 1978, dos días antes de la final. De su cautiverio recuerda el nudo de una contradicción para muchos incomprensible: "En la cárcel, como los guardias también querían escuchar los partidos, el relato radial nos llegaba por altoparlantes. Era extraño, pero en un grito de gol nos uníamos los guardias y los prisioneros. Me da la sensación de que en ese momento, por encima de la situación que vivíamos, estaba el sentimiento por Argentina."

En el mundial de 1986 se enfrentaron la selección de Argentina y la selección de Inglaterra, en uno de los partidos más recordados de la historia de los mundiales, tanto por los dos goles argentinos, como también por el morbo que rodeaba el enfrentamiento de dichas selecciones, ya que ambos países apenas en el año de 1982 se habían enfrentado militarmente en la llamada “Guerra de Las Malvinas”.

Estas son algunas de las historias que ligan al futbol y las cuestiones políticas tanto nacionales como internacionales.

He querido dejar para el final unas de las historias que en lo personal me han resultado más impactantes, la primera se da el año de 1936. Cuenta Eduardo Galeano que en el marco de los juegos olímpicos celebrados en Berlín, se enfrentaron las selecciones de Perú y Austria con la presencia en los palcos de honor de Adolfo Hitler, ganando Perú 4 goles a 2 a Austria, pese a que el árbitro le anulo 3 goles a Perú, con una delantera conocida como “El Rodillo Negro” (por el color de piel de sus jugadores), causando la ira de el Führer. Los Directivos y organizadores de las olimpiadas esa misma noche anularon el partido, por lo cual la delegación peruana se retiró de los juegos olímpicos, y a la postre Austria se quedaría con la medalla de plata.

El año de 1942 se jugo un partido que se conocería como el “Partido de la Muerte”, en el cual la Selección Nacional de la Wehrmacht (Fuerza de Defensa o Fuerzas Armadas Unificadas de la Alemania Nazi) se enfrentó a un grupo de prisioneros ucranianos que habían formado un equipo llamado FC Start, el cual estaba conformado en su mayoría por jugadores del Dinamo de Kiev, ganando estos últimos el partido 3 goles a 1. Pese a la advertencia hecha por un oficial Alemán de que “los alemanes jamás habían perdido un partido en un territorio ocupado”. Esta victoria le costo la tortura y la vida a muchos de los jugadores ucranianos.

Y la historia que me ha resultado más impactante se da el año de 1950, en el marco del famoso “Maracanazo”, y su protagonista es Moacir Barbosa Nascimento.

Pero antes de proseguir, ¿saben de qué color era el uniforme de Brasil cuando jugo la final de 1950?.

Barbosa era el portero titular de la selección brasileña que cayó ante Uruguay 2 goles a 1. Es decir, él fue el arquero que recibió el gol que anoto el uruguayo Alcides Edgardo Ghiggia, gol que sellaría la victoria uruguaya y que marcaría el resto de su vida a Barbosa.

¿Por qué la historia de Barbosa me ha impactado de manera especial? Considero que es, porque refleja una crueldad miserable y estúpida de las personas hacía un individuo y un momento en el que fincaron sus sueños egoístas de grandeza que resultaron fallidos. Y me impacta también por la fina línea que cambia completamente la vida de los hombres, un segundo que se hubiera lanzado antes, un centímetro que se hubiera lanzado más, ¡un hoyo!, ¡una hormiga! que se hubiera atravesado entre él y el balón ¡POR EL AMOR DE DIOS!, y el hubiera sido un héroe, pero ¡NO! …, en cambio de eso:

"Llegué a tocarla y creí que la había desviado al tiro de esquina, pero escuché el silencio del estadio y me tuve que armar de valor para mirar hacia atrás. Cuando me di cuenta de que la pelota estaba dentro del arco, un frío paralizante recorrió todo mi cuerpo y sentí de inmediato la mirada de todo el estadio sobre mí". Esas son palabras del propio portero, que pareció darse cuenta de inmediato todo lo que estaba por vivir. "La mirada de todo el estadio sobre mí", esa fue su sensación en la cancha, la misma que vivió en las calles durante el resto de su existencia”.

Barbosa tuvo que aguantar el resto de su vida como la gente le ignoraba, le daba la espalda e incluso le despreciaba por la calle. “Mira hijo, ése es el hombre que hizo llorar a todo Brasil”, le llegó a decir una mujer a su hijo señalando a Barbosa en un mercado de Río, treinta años después del "Maracanazo".

En 1993 se dice que Mario “Lobo” Zagallo ordeno se le impidiera entrar a ver la selección que se preparaba para el mundial de 1994, cuando Barbosa quiso visitarlos para desearles suerte “Ese hombre trae la mala suerte" dijeron …, ¡Él ya estaba acostumbrado al desprecio!.

"En Brasil -dijo Barbosa- la pena mayor por un crimen es de treinta años de cárcel. Hace 43 años que yo pago por un crimen que no cometí."

Pero aún muchos de los grandes vencedores han sido olvidados, ejemplo: Obdulio Varela, Garrincha, etc.

El futbol como hemos visto es más que un simple juego. Para mi ha sido parte de mi vida, de hecho el primer libro que leí por mi propia voluntad integro se llama “La fiesta del Alarido y las Copas del Mundo”, y fue un regalo que me hizo mi mamá cuando era chico y mi mundo era el futbol.

Si ustedes me preguntaran ¿cuál es el mejor partido de futbol que he visto? Les respondería que es aquel en el que un grupo de personas se reúne a jugar por jugar, en un parque, en la calle, en un baldío, donde no importa si los postes son dos piedras y el balón un frutsi.

Si ustedes me preguntaran ¿cuál es el mejor estadio que he visto? Les respondería que es el campo que estaba detrás de la primaria en que estudie, y que para los que jugábamos ahí, era más grande y majestuoso que el Maracaná, Wembley y el Azteca juntos.

Si ustedes me preguntaran ¿Cuáles son los mejores jugadores que he visto? Les diría que son todos aquellos con los cuales he tenido el privilegio de jugar: Bernabé, Irwing, Israel Igor, Carlos David, El Zorro, Enrique, Braulio, Miguel, Juan Lucario, Abraham, Manuel, Ulises, Covarrubias, etc. Y recientemente el mejor de todos definitivamente, él es espectacular en verdad, nunca le he podido ganar ni un partido, ¡ni uno sólo!.

El futbol si uno se da el tiempo de vivirlo y verlo detenidamente, es más que patear y detener una pelota, el futbol es toda una historia.

Aaaahhhhhhh, el color del uniforme de Brasil en 1950 era totalmente blanco con vivos azules en las mangas y el cuello.


Es cuanto.